SEFIRAT HAOMER

SEFIRAT HAOMER

סְפִירַת הָעֹמֶר

LA CUENTA DEL OMER

MEDITACIONES JASÍDICAS 4

Año 5783 4

Las palabras pueden matar. 5

¿Qué te ilumina? ¡Dale significado! 6

¿Cómo decir y expresarnos de una buena manera? 6

¿Quieres hablar? ¡cállate la boca! 7

Año 5782 y anteriores 7

Behar fuera de Israel ; Bejukotai dentro de Israel 7

Tres Figuras Mesiánicas 8

Cinco versos generales 9

Subiendo por la escalera del alma 11

LA CUENTA DEL OMER EN LA TIERRA Y EN EL CIELO 13

OBTENER LA LIBERTAD EN ARAS DE UN OBJETIVO SUPERIOR 14

PEDIR Y BUSCAR 14

EL VERDADERO SECRETO 16

ENCONTRAR EL TESORO 16

¿Cuál es la conexión entre pensamiento y alegría? 17

Rectificando el corazón con alegría 17

VIDEOS 19

VIDEOS GAL EINAI 19

Año 5783 19

Año 5782 y ANTERIORES 20

Los Hijos de Moshé 20

Innovaciones en Cabalá ¿Es posible? 23

Rectificación de las Emociones y el mes de Iyar 24

Gal Einai Internacional clase 13 24

Videos para Sefirat haOmer 25

por el Rabino Jaim Frim 5780 25

Para refuá Shlemá de Jaim Sholem DovBer ben Devora Ruth 36

Salmo 20: 37

MEDITACIONES JASÍDICAS

Año 5783

A picture containing fabric

Description automatically generated

EL ARTE DE HABLAR
Herramientas simples para expresar tu luz interior

Bs”D, Sorbos de Luz, Parashat Emor 5783

“¡Te despedazaré como a un pez!”, abofeteó un hombre a su adversario en medio de una discusión entre ambos en la sinagoga de la localidad de Mezhivuzh. En ese momento el Baal Shem Tov se encontraba presente en el lugar y al escuchar esto ordenó a sus alumnos que pusieran sus manos uno sobre los hombros de su compañero y cerraran sus ojos, en los siguientes instantes los alumnos quedaron atónitos, vieron en su mente como ese judío literalmente hacía pedazos a su oponente.

“La vida y la muerte en manos de la lengua”. El nombre de la parashá Emor, “habla”, nos invita a escuchar las cosas que salen de nuestra boca y examinar no solo lo que decimos sino también cómo lo decimos. Ven conmigo:

Las palabras pueden matar.

Nuestras palabras significan mucho aunque no veamos cómo. A los seres humanos se nos llama מדבר, ‘medaber’, “parlante” porque eso es lo que nos distingue de los animales. Las buenas palabras son capaces de provocar grandes cambios en los oyentes y, por otro lado, de sembrar una gran destrucción, de crear mundos y destruirlos. ¿Para crear mundos decíamos? Dios en su honor y por sí mismo creó nuestro mundo hablando, דיבור, dibur, sino más precisamente diciendo, מאמר, maamar.

En general, ¿cuál es la diferencia entre decir y hablar? El Radak, uno de los más grandes gramáticos, dice que hablar es la expresión misma, pero decir es precisamente cuando hay alguien más, es dirigirse al otro. Las palabras de la raíz emor, אמור, aparecen en la Torá más de 5.000 veces, muchas más que todas las variedades de hablar. El dicho es la principal forma de expresarnos a los que nos rodean.

Tres de esas apariciones de la raíz emor, decir, se encuentran en el versículo inicial del versículo:

ויאמר ה’ אל משה אמר אל הכהנים… ואמרת אליהם…”.

“Y dijo Hashem a Moshé: dile a los sacerdotes… y tú les dirás…”

La tercera aparición es algo innecesaria y por eso los sabios interpretan que tiene la intención de “advertir a los grandes acerca de los pequeños”, más allá de que Dios le diga a Moshé que les diga a los sacerdotes que no se contaminen, los mismos sacerdotes deben decírselo a sus hijos, y velar porque ellos tampoco se contaminen.

Cada uno de nosotros sirve como ‘grande’ para los demás. Todos y cada uno tiene una cualidad o talento especial que solo él recibió que debe dar al entorno. Nuestra manera de influir y darnos a los demás es a través del habla. En profundidad, “advertir”, להזהיר, no es sólo una conjugación que deriva de la palabra “advertencia”, אזהרה, sino también de la palabra resplandor, זוהר, Zohar, y luz, אור, or. Debemos iluminar el entorno con nuestra luz especial e interior, y esto a través de las buenas palabras.

¿Qué te ilumina? ¡Dale significado!

¿Cómo decir y expresarnos de una buena manera?

La respuesta está en la raíz lingüística del decir mismo: אמר, omer, “decir”. Según el Zohar, el trío de palabras אור, מים, רקיע, or/maim/rakía, luz, agua y firmamento están implícitos en esta raíz. Este trío expresa el proceso de expresión y realización de cosas abstractas y ‘elevadas’ la luz es abstracta, espiritual e imperceptible. El agua ya es una sustancia determinada pero líquida y no consolidada. Mientras que el firmamento es la transformación del agua en una sustancia real y definida. Cuando Dios quiso crear el mundo lo creó exactamente de esta manera: inicialmente todo era luz espiritual, luego la luz se convirtió en agua que lo llenaba todo y finalmente en el segundo día de la creación las ‘aguas superiores’ se convirtieron en un firmamento verdadero y ‘sólido’.

Cada uno de nosotros necesita pasar por este proceso para poder expresarse de una buena manera. Primero debemos buscar la luz dentro de nosotros. Debemos preguntarnos ‘¿qué me ilumina?’ y enfocarse en ello, aunque todavía no pueda ser explicado y expresado. Debemos convertir en agua las chispas de luz que existen dentro de nosotros, organizarlas en forma de pensamientos y letras que les darán expresión. Luego expresaremos estos pensamientos en un discurso claro y enfocado.

Básicamente, todo proceso creativo es así y existe una excelente ilustración de esto en el proceso de creación de un niño: la Cabalá explica que la gota de semilla de la que se crea un niño es la etapa intermedia, el agua, pero incluso antes de eso había una conciencia de luz espiritual en la mente del padre. En la tercera etapa, que tiene lugar en el vientre materno, esa gota de líquido toma una forma clara, מתרקעת’, mitrakaat, se ‘consolida’ y se forman los tejidos de un ser vivo. La capacidad de expresarnos externamente depende de la correcta ejecución de estos tres pasos.

“¡Él no me entiende!”

Refinamos los mensajes, dimos forma clara a las ideas abstractas y finalmente las contamos a quienes nos rodeaban. Pero, ¿por qué no son aceptados en el corazón de los oyentes?

La respuesta es que nuestro discurso carece de un componente esencial y crítico. ¿Cuál es ese ingrediente? La conocida frase (que algunos dicen que proviene de los Sabios) nos da la respuesta: “Las cosas que vienen del corazón entran al corazón y ejercen su acción.” Aunque hayamos aprendido a poner palabras a las ideas y a afinar oraciones precisas, no hay garantía de que afecten a otros. Se requiere una conexión interior y de corazón que llene las palabras habladas y haga que afecten a los oyentes.

Este es un proceso ilustrado por acrónimos adicionales para la raíz emor: fuego, agua, viento, אמר – אש, מים, רוח, esh, maim ruaj. Lo dicho parte del corazón. Tenemos una combustión interna, cosas que nos ‘calientan’ y que queremos decir. Debemos prestar atención literalmente a que lo que decimos sí venga de ahí. Si el calor interior acompaña el habla influirá y entrará en el corazón de los demás.

También en este proceso hay etapas que solo por las cuales lo que decimos salga de manera óptima. Una persona puede calentarse y quemarse por algo determinado, pero ‘quemarse por dentro’ y no ser capaz de expresarlo correctamente. Por eso, la combustión del fuego interno debe enfriarse y convertirse en agua para que pueda fluir fuera de nosotros. Para dar letras y expresión a lo que arde en nuestro interior. La tercera etapa es el ruaj, viento, aire: debemos hablar con moderación y paciencia, no ‘derramar’ las palabras sobre los oyentes, sino darles suficiente espacio para que puedan interiorizar nuestro deseo.

¿Quieres hablar? ¡cállate la boca!

No se puede salir de un lugar sin antes entrar en él. El entendimiento de que las conversaciones deben venir del corazón nos lleva a entrar dentro del corazón. Ingresar al corazón va acompañado de silencio, ahora no nos expresamos, sino que nos examinamos y nos organizamos por dentro, pronto saldremos. El silencio es el mejor telón de fondo para el habla. Una persona que sabe estar en silencio y no ‘presionada’ para hablar es aquella cuyo discurso se utiliza verdaderamente como una expresión de calidez y profundidad interior. En el silencio hay una especie de susurro interior, solo conmigo mismo que le otorga a nuestras palabras que surgen un tono suave y sentido. Así, cuando decimos no sólo me expresan hacia afuera, sino que toma en cuenta a los demás y concentran en ellos el calor de mi corazón.

Y en pocas palabras, sefirat haomer, ספירת העמר, la cuenta del Omer es el momento en que debemos corregir nuestra boca y el habla. En los libros de Cabalá y Jasidut está traído que la ofrenda del omer traída de la cebada, que es el alimento de los animales, expresa nuestra animalidad, la cual necesitamos corregir. La corrección es dar boca y expresión propia a los atributos de nuestro corazón. En lugar de Omer, עומר , le daremos al alma el omér, אמר, “decir”. Así iluminaremos nuestros sentimientos, así ‘iluminaremos’ la pequeñez que existe en nuestro interior. Así es como sacamos nuestra luz interior afuera, a la luz del mundo.

Sharia Nitzan, ‘Sorbos de Luz’.

Año 5782 y anteriores

Magazine Gal Einai de la semana

Behar fuera de Israel ; Bejukotai dentro de Israel

https://madmimi.com/s/95e7f31

Felicitaciones a la Familia Prodantchesky, Abraham Itzjak y Lea y los chicos, que trabajan duro para traer Torá y Jasidut a Israel, y en especial producir estos dos días de alegría y espiritualidad en honor a Rabi Shimón Bar Iojai.

Tres Figuras Mesiánicas

Hay tres figuras mesiánicas asociadas con el período de la cuenta del Omer: Rabi Akiva, quien declaró que Bar Kojba era Mashíaj, Rabi Meir, quien dijo que él mismo era Mashíaj, y Rabi Shimón Bar Iojai, quien reveló los secretos de la Torá y se le dijo con ellos se llegaría a la época del Mashiaj con misericordia. En algunos aspectos, el sionismo y el Estado de Israel en nuestros días es una especie de reencarnación de Bar Kojba. Debemos identificar la chispa mesiánica en ambos, pero también debemos aprender del pasado y no llegar a un estado de colapso y decepción. La clave es conectar nuestra expectativa del Mashíaj con la imagen de un auténtico erudito de la Torá, como Rabi Meir, con una conexión profunda con la luz de la dimensión interior de la Torá revelada por Rabi Shimón Bar Iojai. ¡Que podamos hacer todas estas conexiones pronto!

Shabat shalom,

Jaim Frim y el equipo Gal Einai

EL CALENDARIO JUDÍO

EL MES DE IAAR Y SEFIRAT HAOMER

EL PRINCIPIO MÁS GRANDE DE LA TORÁ

Rabí Akiva dijo: “Ama a tu prójimo como a ti mismo” es un gran principio de la Torá. Un principio similar se obtiene de la famosa historia de un prosélito que deseaban convertirse al judaísmo, a condición de que alguien le enseñe toda la Torá mientras está parado en un pie. Hilel el Viejo aceptó su conversión y le dijo: “Lo que odias, no lo hagas a tu amigo [la visión negativa de “ama a tu prójimo como a ti mismo”], eso es toda la Torá y lo demás es comentario. Ve y estúdialo”.

Obviamente, toda la Torá es verdad, Dios nos ha dado la Torá, pero Hilel el Viejo y Rabi Akiva nos enseñan que hay espacio para meditar en el principio que es el “gran principio” de la Torá, la señal que nos pone en el camino correcto.

La necesidad de esas luces de guía es mayor cuando un extranjero quiere acercarse al mar infinito de la Torá y necesita un mojón para mostrarle dónde empezar. Esta es la razón por la que el principio más grande de la Torá se aprende de un prosélito que se viene a convertir. Un verdadero converso no está obligado a saber toda la Torá antes de convertirse, pero sí necesita saber los fundamentos esenciales de la fe judía, entonces puede aceptar el yugo de la Torá y las mitzvot con toda sinceridad. Rabí Akiva, el gran sabio de la Torá, también llegó a la Torá como un “extranjero”, era un baal teshuvá (un judío secular que se convierte en observante de los preceptos), que sólo comenzó su estudio de la Torá a la edad de cuarenta años.

Estos dos “extranjeros”, el baal teshuvá y el converso, que inician su estudio de la Torá de la nada a una edad avanzada, están en la necesidad de una estrategia de acceso directo y es nuestro privilegio aprender el gran principio de la Torá a través de sus méritos. Nuestra generación es también una generación de teshuvá (arrepentimiento), por lo que muchos judíos están lejos de la Torá y muchos desean regresar a su origen. Por eso, más que nunca, necesitamos un camino que nos permita acercarnos a la Torá después de años y generaciones de desprendimiento y comenzar de una generalización que contenga todos los detalles y explicaciones. Un ejemplo de este enfoque es el Rebe Menajem Mendel Shneerson, el Rebe de Lubavitch, quien escogió doce versos significativos para el movimiento de niños de Tzivos Hashem (“Ejército de Dios”) que son buenos incluso para que los adultos aprendan y repitan de memoria de forma regular.

Obviamente, la identificación de los principios filosóficos de la Torá es importante para todos, no sólo para aquellos que aún no son competentes en el estudio de la Torá. Incluso los más grandes estudiosos de la Torá y los tzadikim deben identificarlos también. Sin embargo, no tienen la misma necesidad de buscarlos como los “extranjeros” que se mencionaron anteriormente. Ellos estudian la Torá y observar todas las 613 mitzvot y pueden relacionarse naturalmente con el gran principio como una premisa simple. Cuando el prosélito exige que se le enseñe toda la Torá parado sobre un pie, Hilel revela el gran principio cuya luz sigue y ahora nosotros también podemos beneficiarnos de su premisa previamente oculta, que ahora ha pasado a formar parte del dominio público. Ahora también, tan distantes como estemos, podemos captar este principio y permitir que nos ayude a avanzar en todos los aspectos de la Torá.

Aunque a veces un gran sabio puede tener dificultades para formular sus axiomas fundamentales en términos simples, alguien tan humilde como Hilel tiene una respuesta preparada, que es la más adecuada para incluso la persona más alejada y humilde, mientras está parado sobre un pie.

Cinco versos generales

Ya que nos estamos ocupando de los principios generales, podemos tratar de descubrir nuevos principios en la Torá. La generalización de “Ama a tu prójimo como a ti mismo” no es sólo un importante principio entre las convenciones de la Torá y la observancia de las mitzvot, sino un versículo de la Torá, y puesto que la Torá se compone de cinco libros diferentes, tal vez podemos identificar cinco de estos principios.

Vamos a meditar por un momento en el libro del Génesis y considerar cuál es el verso más famoso y más en general de este libro. Naturalmente, el versículo que inmediatamente viene a la mente es el primero: “En el principio, Elokim [Dios] creó los cielos y la tierra.” Este es el verso que inicia todo y ejemplifica todo el libro de Génesis, el libro de la creación y el comienzo de la humanidad, en un solo verso.

Continuemos con el libro del Éxodo: aquí nos sentimos atraídos por la primera estrofa de los Diez Mandamientos: “Yo soy Havaiá, tu Dios, que te sacó de Egipto, de la casa de servidumbre.” Este es el principio fundamental de nuestra la fe que une la Entrega de la Torá con la salida de Egipto, que es el punto principal de la historia del libro de Éxodo.

Cuando llegamos al libro de Levítico, el libro central de la Torá, Rabí Akiva ya ha hecho el trabajo por nosotros: “Ama a tu prójimo como a ti mismo” es el gran principio de este libro.

El pasaje que elegimos en el libro de Números contiene los tres versos de la bendición sacerdotal, que tenemos la costumbre de leer todas las mañanas después de la bendición sobre la Torá, es decir que es representativa de toda la Torá Escrita.

Por último, en el libro de Deuteronomio nuestra elección es simple: “Oye, Oh Israel, Havaiá es nuestro Dios, Havaiá es uno.” Este verso es la declaración por excelencia de la fe judía, un verso que decimos dos veces al día y sus palabras estuvieron en la boca de un sin número de judíos que fueron llevados a la muerte para santificar el Nombre de Dios como judíos.

Antes de ahondar en el significado de estos cinco versos, vamos ordenarlos en una estructura familiar: el número total de palabras en estos cinco versos es de 49 y eso nos recuerda de inmediato los cuarenta y nueve días en los que contamos el Omer. Por lo tanto, podemos hacernos una “tabla de la cuenta del Omer” en la que cada palabra corresponde a un día, desde el primer día, representado por “En el principio” (בְּרֵאשִׁית, bereshit) hasta el último día, representado por la última palabra del último verso: “Uno” (אֶחָד, Ejad)

Esta correspondencia es especialmente adecuada porque la inspiración para el establecimiento de estos versos como versos generales es de Rabí Akiva, la figura más prominente durante la cuenta del Omer. Fue durante este período que los estudiantes de Rabi Akiva murieron porque no actuaron con respeto hacia el otra (que es la razón por la que observamos ciertas costumbres de duelo durante este período). El gran principio de Rabi Akiva: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”, un versículo que aparece en la Parashat Kedoshim, que siempre se lee durante el período del Omer, es nuestro servicio principal durante la cuenta del Omer, y viene como un antídoto para rectificar el pecado del odio y la discordia entre los judíos.

Hay una serie de fenómenos significativos que se pueden extraer de la tabla que acabamos de describir, tres de los cuales vamos a mencionar:

1. Las palabras “Ama a tu prójimo como a ti mismo” (וְאָהַבְתָּ לְרֵעֲךָ כָּמוֹךָ) se encuentra exactamente en el centro de la tabla en los días 24, 25 y 26 del Omer, la palabra “tu prójimo” (לְרֵעֲךָ) es el centro del centro!

2. La palabra “paz” (שָׁלוֹם) cae el 28 de Iyar, el día en que por la milagrosa Providencia Divina merecimos regresar a Jerusalén, la ciudad Santa de La Paz y al Monte del Templo (“La Casa de la Paz”), hace cuarenta y seis años!

3. La palabra “Israel” (יִשְׂרָאֵל) en el versículo del Shemá, cae en el primer día de Siván, el día en que todo el pueblo judío acampó delante de monte Sinaí para recibir la Torá “como un sólo hombre con un sólo corazón.”

Subiendo por la escalera del alma

Ahora podemos reflexionar sobre el contenido de estos cinco versos generales, y vemos que siguen un curso lógico de elevación. Con el fin de enriquecer nuestra meditación, vamos a utilizar un quinteto familiar de conceptos jasídicos que enumeran los cinco niveles de nuestra alma: “psique”, “espíritu”, “alma”, “viviente”, “singular” (נֶפֶשׁ, רוּחַ, נְשָׁמָה, חַיָה, יְחִידָה, nefesh, ruaj, neshamá, jaiá y iejidá).

· La “psique”, nefesh, (נֶפֶשׁ) es el nivel más básico, la fuerza de la vida física que experimentamos en nuestros cuerpos y en nuestras acciones instintivas, que superficialmente recuerda a una fuerza de vida animal.

· El “espíritu”, ruaj, (רוּחַ) expresa el mundo de las emociones y se manifiesta en nuestras relaciones con los demás, un nivel en el que ya podemos identificar la “ventaja del hombre sobre el animal.”

· El “alma”, neshamá, (נְשָׁמָה) es el nivel que se expresa en nuestro mundo intelectual. En el ámbito del “alma” nos elevamos por encima de la perspectiva sensual-física y somos capaces de pensar en conceptos abstractos (incluyendo, por ejemplo, la capacidad para obtener un principio de una colección de detalles).

· “El viviente”, jaiá, (חַיָה) está en un plano superior completamente más allá de nuestra mente consciente. Este plano se conoce como “luz circundante” (en contraposición a la “psique”, el “espíritu” y “alma”, que son “luces interiores”) que todavía está lo suficientemente cerca como para poder a veces tomar conciencia de su influencia, como una “atmósfera” de santidad que me rodea y me guía en mi camino en la vida.

· El “singular”, iejidá, (יְחִידָה) es la fuente del alma, el punto central que se aferra eternamente a su fuente infinita en Dios. El “singular” es una “luz circundante distante”, que se revela sólo en momentos únicos en la vida, como en los momentos de total auto-sacrificio.

Ahora podemos meditar sobre la correspondencia entre los cinco versos y estos cinco niveles del alma.

· Génesis: “En el principio Elokim [Dios] creó los cielos y la tierra” debe ser mi experiencia fundamental en el ámbito de la psique. Dios creó el mundo, con la humanidad, la joya de la corona de la creación, incluida. El Nombre esencial de Dios, Havaiá, todavía no aparece en este versículo, solamente el Nombre Elokim (אֿלֹהִים), que representa a Dios como Creador y Director de la naturaleza [אֿלֹהִים tiene el mismo valor numérico que “la naturaleza” (הַטֶבַע)]. En este nivel básico del alma sólo tenemos un reconocimiento claro de que más allá del mundo natural hay algo más. Este versículo también indica que mi psique no se percibe como algo completamente diferente a mi cuerpo, la psique y el cuerpo corresponden a los cielos y la tierra mencionados en el verso, ambos creados por el poder divino natural de Elokim. Así es como el tema central de Génesis es el relato de la vida de los Patriarcas “, mientras que todavía se perciben como una parte de la humanidad en general, antes de que los judíos se convirtieran en una nación, así también mi singularidad como judío no figura todavía a nivel de la psique, que se corresponde con el versículo de Génesis.

· Éxodo: “Yo soy Havaiá, tu Dios, que te sacó de Egipto, de la casa de servidumbre.” Este verso corresponde a un nivel más alto de “espíritu” (רוּחַ), que se eleva por encima de la fuerza vital básica de la “psique”. A este nivel somos conscientes de estar sometidos a la naturaleza y sus límites, al mismo tiempo, aunque conscientes de la posibilidad de un éxodo y de la redención de sus limitaciones por un poder divino. Este versículo del libro del Éxodo, que desafía por completo los principios fundamentales de la naturaleza, nos expone al hecho de que el pueblo judío es una especie diferente por completo: “Tú nos has elegido de todas las naciones… y Su Gran y Santo Nombre has proclamado sobre nosotros. “En el nivel de mi psique me experimento como una persona independiente y definida de todos los demás, pero a este nivel la dimensión de espíritu me atrae hacia el contacto social y me da un sentido de “pertenencia”. En Nisan, el mes de la redención, cada persona judía llega a sentir su pertenencia al pueblo judío y por lo tanto comienza a avanzar hacia Dios, su Dios.

· Levítico: “No tomarás venganza ni guardarás rencor a tu pueblo, y ama a tu prójimo como a ti mismo, yo soy Havaiá”. Este versículo nos lleva al nivel de alma (נְשָׁמָה, neshamá). Después de salir de las estrecheces de Egipto, el pueblo judío se da cuenta de su existencia como una entidad capaz de desafiar al mundo de la naturaleza y que se distingue de la gran aldea global de las naciones. Juntos como un pueblo que teje una relación muy especial guiado por este principio más grande de todos. Es cierto que en un cierto nivel nos preocupamos por todo el mundo y toda la humanidad, nos encanta todo acerca de las creaciones de Dios, pero nuestro amor especial por nuestro “compañero” judío está en un plano completamente diferente. Se trata de un amor que se eleva por encima de todas las diferencias entre tú y yo, a través de la comprensión profunda que nuestras almas se unen en su origen, por lo que se nos ordena amar al otro, literalmente, “como a ti mismo.”

· Números: Los versos de la Bendición Sacerdotal nos acercan al nivel de “viviente”. Habiéndonos elevado ya a los niveles ocultos que rodean el alma, revelamos que después de todos los peldaños que hemos subido hasta el momento, hay un nivel adicional donde estamos tan cerca de Dios que Él nos elige para ser sus mensajeros “para bendecir al pueblo judío con amor.” Esto significa no sólo estar ante Dios como sus hijos amados, sino identificándonos tanto con Él hasta el punto de poder representarlo y llevar su bendición al mundo. Aunque el poder de la bendición en la práctica sólo se concede a los cohanim (sacerdotes), no obstante, los cohanim hacen esto por el poder de todo el pueblo judío, los designamos mensajeros de Dios para que nos bendigan a todos. Todo el pueblo judío es un “reino de sacerdotes y una nación santa.”

· Deuteronomio: finalmente llegamos al versículo: “Escucha Oh Israel, Havaiá es nuestro Dios, Havaiá es uno.” Este versículo de Deuteronomio es la revelación del más alto nivel del alma, el “singular” (יְחִידָה). Constantemente proclamamos la unidad de Dios, sino sólo el nivel de “singular” de nuestras almas verdaderamente puede percibir cómo Dios es verdaderamente singular y a qué grado el mundo entero se anula y se incluye dentro de su unidad Divina. Este es el mensaje que recibimos de todo el libro de Deuteronomio, que nos prepara para entrar en la Tierra de Israel, un mensaje que nos dice: ahora, cuando estás a punto de comenzar una “vida normal” como pueblo en tu tierra, debes recordar también que no has venido aquí sólo para ser una “nación libre en nuestra tierra”, sino para ser el pueblo de Dios, que atestiguamos Su unidad a través del diario auto-sacrificio en nuestra vida cotidiana, y este conocimiento es tu razón de ser.

Para terminar, vamos a recordar que el eje de los cinco versos y el mayor principio de todos es “ama a tu prójimo como a ti mismo”, la conexión de todas nuestras almas judías por amor. Este es el corazón de nuestro ser, de donde derivan los niveles de la psique y el espíritu y desde las cuales somos disparados hacia arriba a los niveles de la viviente y singular. ¡El principio máximo de la Torá es no olvidar nunca a tu prójimo judío!

Este artículo está basado en nuestro libro Klal Gadol baTorá (en hebreo), que se dedica en su totalidad a esta meditación.

MES DE IAR – LA BÚSQUEDA DEL TESORO

El mes de Iar se encuentra entre dos regalim , Pesaj en Nisan el mes anterior y Shavuot que festejaremos el próximo mes de Sivan. Ambas festividades están separadas por 49 días, exactamente siete semanas. Este intervalo de tiempo constituye una época muy significativa para el judaísmo: Sefirat haOmer o la Cuenta del Omer.

Iar es el mes judío que está “incluido” completamente dentro de esta cuenta y por eso es la más impregnada por sus ricos y variados matices. Meditemos acerca del significado de este mes estudiando el significado espiritual de la Sefirat haOmer.

LA CUENTA DEL OMER EN LA TIERRA Y EN EL CIELO

A primera vista contar el omer es una tarea de lo más sencilla; en efecto cada noche después de la salida de las estrellas, bendecimos de la siguiente manera: Baruj atá Hashem Elokeinu Melej Haolam asher kideshanu bemitzvotav vetzivanu al Sefirat haOmer, que podríamos traducir como: “Bendito eres Tú Hashem Elokeinu Rey del Mundo que nos santificó con tus preceptos y nos ordenó la Cuenta del Omer.”

Luego decimos: “Hoy es el día uno del Omer”, la noche siguiente “dos días…”, luego “tres días…” y así sucesivamente, hasta llegar a 49 días.

Pero por supuesto podemos involucrarnos en esta tarea de una manera más interesante y productiva agregándole algunas cosas. Si miramos un poco más intensamente, vemos que la cuenta del omer tiene dos significados, uno terrenal y otro espiritual, análogos a los de Pesaj y Shavuot.

En el plano terrenal, sefirat haomer es la época de la cosecha que se extiende desde Pesaj, la Fiesta de la Primavera, cuando desde el día siguiente a la festividad de las matzot se comienza a levantar la cosecha, hasta Shavuot, la Fiesta de las Primicias” en que se llevan al Beit HaMikdash los bikurim , las primicias de los productos cosechados de la tierra.

Desde el punto de vista espiritual, la sefirat haomer une a Pesaj, la “Festividad de la Libertad” (en la cual el Pueblo de Israel se libera de la esclavitud de Mitzraim, como se denomina en hebreo al antiguo Egipto y cuya traducción sería “estrecheces”) con Shavuot, la “Festividad de la Entrega de la Torá”, que conmemora el momento en que el Pueblo de Israel se plantó al pie del monte Sinaí y tuvo el mérito de que su Creador se les revele por primera vez como pueblo.

OBTENER LA LIBERTAD EN ARAS DE UN OBJETIVO SUPERIOR

¿Cuál es el significado de esta transición de una libertad recién adquirida a la entrega de la Torá? Sencillamente, este proceso nos viene a enseñar que no es suficiente salir de la esclavitud y la opresión para conseguir la verdadera independencia. La salida de Mitzraim es como salir del vientre materno, cuando recién empieza el proceso de crecer verdaderamente y desarrollarse hasta lograr reconocer y tomar conciencia de nuestro origen Divino. Año tras año volvemos a reproducir este proceso para pasar por él una y otra vez, pero cada vez desde a un nivel más elevado.

Cada año debemos nacer, crecer y hacernos merecedores de una “Torá Nueva” adecuada a nuestro nuevo grado, y por eso dedicamos la época del omer para procurar la enmienda de nuestro comportamiento y nuestras cualidades espirituales.

Entonces, la sefirá no es simplemente la cuenta de los días, sino también un proceso progresivo de introspección y examen de las cualidades del alma. En ese contexto nos concentramos cada día en una cualidad diferente y tratamos de perfeccionarla, según el orden de las sefirot tal como figuran en el Árbol de la Vida, una por semana, inter incluyendo cada día cada sefirá en la sefirá de la semana, como ya conocemos.

PEDIR Y BUSCAR

Para entender con más profundidad cómo se puede utilizar este conteo como herramienta de crecimiento espiritual, meditemos en algunos versos del Libro de Proverbios del rey Shlomoh que aluden a nuestra época de la sefirá: (Proverbios II, 3-4)

“…Im laBiná tikrá, latvunah titen koleja.

Im tevakshena jacasef vejamatmonim tajpesena.

Az tavín irat Hashem…”

“Si has de convocar al entendimiento, presta tu voz a la inteligencia.

Si lo pides como al dinero y como tesoros lo buscas.

Entonces entenderás lo que es el temor a Hashem… “

¿Qué es la biná -el entendimiento- y cuál es su conexión con sefirathaomer? El entendimiento es la sabiduría profunda e interna del corazón. Es la verdad que el corazón conoce en su interior pero no se revela en la superficie.

La Cabalá habla acerca de los Jamishím Shaarei Biná, “los Cincuenta Portales de la Sabiduría”, cincuenta “pasos” espirituales que hay que dar para llegar a adquirir el entendimiento espiritual. La cuenta del omer de 49 días representa justamente esos pasos, agregados al paso cincuenta de Shavuot.

Encontramos otra insinuación en la palabra matmonim, “tesoros”, que se puede separar en mem-tet monim, una alusión a la cuenta de mem tet (de guematria 49) días entre Pesaj y Shavuot. Entonces, la sefirat haomer es una travesía en busca del tesoro oculto del entendimiento.

El segundo verso diferencia entre dos formas de convocar a la Biná, de lograr adquirir entendimiento: el pedido y la búsqueda. La diferencia entre ambos radica en que quien pide está interesado en algo que ya conoce y por eso lo “solicita”, esperando conseguir el objeto que desea. Efectivamente, aquí está pidiendo “dinero”, la clase de valor más conocido y generalmente más solicitado.

No así el que busca, quien está interesado en algo “desconocido” y sale “a buscarlo”. Por lo tanto aquí el objeto buscado incluso está oculto, es un “tesoro” que no se sabe exactamente qué es y donde está escondido.

Entre ambas metáforas, la búsqueda del tesoro es la que más se puede asociar con la cuenta del omer. Pasar revista a las cualidades del alma es como buscar un tesoro, debemos excavar en nuestro interior y descubrir las cualidades buenas que tenemos ocultas. Así nos purificamos y nos hacemos dignos de recibir una abundancia espiritual nueva.

EL VERDADERO SECRETO

Existe una efervescencia en la cultura de hoy en día alrededor de libros y videos pretendiendo enseñar métodos para enriquecerse que hasta ahora estaban guardados celosamente como un secreto para unos pocos elegidos y de repente son descubiertos y revelados públicamente, como por ejemplo la así llamada “ley de la gravedad”. De acuerdo con este método, debemos concentrar nuestra imaginación alrededor de objetos y valores que queremos poseer y de esa manera son atraídos automáticamente hacia nosotros.

El estilo con que son presentadas las cosas en esos libros y videos, hace que se vean revestidos de un atuendo muy espiritual, pero en la práctica se trata de un sistema que “saltea”, evita el esfuerzo en aras de un cambio espiritual verdadero A pesar de la abundancia de ejercicios mentales que propone y del acento que pone en el estado de conciencia del hombre, no se cuestiona para nada quién ese “yo” hacia el que queremos atraer todo, si soy apto o merecedor de todas esas cosas, o si acaso mi pedido purifica y refina de alguna manera mis bajos deseos o los manifiesta y satisface.

En otras palabras, este método deja al corazón con su superficialidad y no llega ni siquiera a rozar la voluntad y deseos interiores.

De acuerdo con la Cabalá toda cosa negativa tiene una raíz espiritual superior a través de la cual se la puede reparar y concretar de manera correcta. La ley de la gravedad no es una excepción: se trata de una versión grosera de la expresión del rey Shlomó tebakshena jakesef , “pídela como al dinero”, que anula la jaf (“como”) comparativa y en vez de entendimiento pide-exige simplemente dinero.

Y de la misma manera, el tikún , la reparación del pedido de dinero es ujematmonim tejapsena , “y como tesoros la buscarás”: en vez de valores visibles hay que desear tesoros interiores y más profundos, y en vez de pedir que lleguen a nosotros, debemos desplazarnos de nuestros lugares y salir en busca de ellos.

Por cierto, lo que puede generar una transición desde un mero pedido de plata material hacia la búsqueda del tesoro interior es justamente la Cuenta del Omer. El refinamiento de las cualidades de forma progresiva no deja nuestras pasiones terrenales en su estado primitivo, sino que ve en cada deseo la cubierta de una demanda espiritual profunda y trata de rastrearla hacia el interior. La Biná , ese entendimiento que conspira contra ese deseo inmaduro es una honda conexión con lo íntimo del corazón que asegura que sus deseos sean cumplidos.

ENCONTRAR EL TESORO

La ilustración de esta idea se encuentra en la estructura im… az… , “si… entonces…”, de los versos citados de Proverbios. Si nos enfocamos en el valor numérico de estas palabras se revela que alef mem (im , 41) más alef zain (az , 8) suma mem tet (49). De acuerdo a esto se puede dividir la cuenta del omer en dos sub etapas: los 41 días iniciales a nivel de im , que dan lugar a lucha interior, planeamiento y preparación y los 8 días finales a nivel de az , en el que implementamos el proyecto que preparamos en la primera parte.

En nuestro caso, el pedido de dinero en sí mismo debemos dejarlo más bien para los días últimos de az , y en cuanto a la búsqueda de los tesoros ocultos dedicamos los días de im para el trabajo interior, después de los cuales llega preparado y maduro el momento de la concreción.

¡Y el que busca, encuentra!

PENSAMIENTO POSITIVO

¿Cuál es la conexión entre pensamiento y alegría?

Consideremos lo que sucede cuando las cosas no salen según lo planeado. Esto es lo que ocurre durante los días de la Cuenta del Omer, tiempo durante el cual practicamos algunas costumbres de duelo y dolor (como la prohibición de cortarse el pelo o casarse). ¿Cómo afrontar una realidad externa triste y pesada? Con pensamiento positivo.

El Baal Shem Tov enseñó que el poder del pensamiento es potente: “La persona está donde están sus pensamientos”. Con el pensamiento positivo, puede ser feliz en cualquier situación. La palabra hebrea para pensamiento (מַחְשָׁבָה, majshavá), es un anagrama de la palabra “con alegría” (בְּשִׂמְחָה, besimjá). Además, cuando empleamos el pensamiento positivo nuestros pensamientos cambian la realidad. Los pensamientos positivos aumentan con nuestro acto diario de Contar el Omer durante este período de tiempo, un hecho al que se alude por el hecho de que la palabra para “contar” (סְפִירָה) tiene el mismo valor que “pensamiento” (מַחְשָׁבָה). Cada vez que contamos, de hecho, estamos teniendo un pensamiento feliz, y la felicidad y el gozo tienen el poder de expandir y aumentar, como también es evidente en la breve oración que decimos al final del conteo: “Con esto [contando] que sea agregado un gran sustento en todos los mundos”.

Nuestro mundo está lleno de dificultades y preocupaciones, pero con el poder de nuestros pensamientos podemos vivir en un mundo que está impregnado de bondad. En este mes de Iyar, se nos invita a dedicar nuestros pensamientos a una realidad diferente, espiritual y oculta: la realidad del Mundo Venidero. Empleando este pensamiento, podemos atraer el gozo del Mundo Venidero a este mundo.

Rectificando el corazón con alegría

Después de recitar el Conteo diario del Omer decimos una oración: “Por el mérito de la Cuenta del Omer que conté hoy, que todo lo que he mancillado en la sefirá de (se dice la sefirá del día) sea rectificado”. Los siete atributos desde la bondad (jesed) hasta el reinado (maljut) están inter-incluidos entre sí, sumando un total de 49 pares de atributos, uno mayor y otro menor, que reflejan la amplia gama y detalle del universo de nuestra estructura emocional. Todos los atributos de las emociones del corazón se rectifican así con estos 49 pares de atributos inter-incluidos durante los 49 días de contar el Omer.

¿Cómo rectificamos el corazón? ¿Cómo hacemos las paces entre nuestros diversos y a veces contradictorios rasgos de carácter y entre personas con diferentes rasgos e inclinaciones? ¿Y cómo transformamos nuestra primera inclinación en una respuesta rectificada, procesada y destilada? Lo hacemos usando nuestras mentes, que controlan y manejan nuestras acciones. La sefirá de entendimiento en nuestras almas, el poder de la meditación y el pensamiento, se compara con “la madre de los hijos” que da a luz los atributos del corazón. Hay 50 Puertas del Entendimiento, que acompañan desde arriba el proceso de rectificación durante los 49 días de la Cuenta del Omer.

Cuando recordamos que la muerte nos espera, nuestro corazón se llena de tristeza. El conocimiento de nuestro inevitable fallecimiento puede hacer que cada alegría fugaz termine en última instancia con una sensación de pavor o depresión. Pero gracias al poder del entendimiento estamos llenos de verdadera alegría, “la madre de los hijos es feliz”, como en el Mundo Venidero. Incluso una persona que se encuentra en un estado de depresión llamado melancolía (מָרָה שְׁחוֹרָה, mará shjorá, bilis) puede cambiar el orden de esas letras para que formen “un pensamiento alegre” (הִרְהוּר שָׂמֵחַ, hirhur sameaj). Por lo tanto, con el poder del pensamiento, específicamente con los pensamientos positivos mientras esperamos la alegre festividad de Shavuot cuando celebramos la Entrega de la Torá, podemos transformar todo el dolor, en la celebración del futuro durante el mes de Iyar.

Rabino Itzjak Ginsburgh

VIDEOS

VIDEOS GAL EINAI

Año 5783

BENDICIÓN PARA LAS NIÑAS DEL COLEGIO DEL RAV EN EL DÍA 18 DE LA CUENTA DEL OMER

Bendición para las niñas del colegio del rav en el día 18 de la cuenta del omer

https://youtu.be/uQxAR7q2pNw

Bendición para las niñas del colegio del rav en el día 18 de la cuenta del omer

https://youtu.be/mVFd4IOXxPk

Año 5782 y ANTERIORES

Curso de Torá por Zoom

30

El Mes de Iar y la Cuenta del Omer –

Los Hijos de Moshé

01 mayo 2022

5782

Estudio de Judaísmo: El Mes de Iyar y la Cuenta del Omer - Los Hijos de Moshé 5782

https://youtu.be/BqIpvGluq1Y

Curso de Torá por Zoom

Shiur 31

Leyes del Omer y Costumbres de Duelo

10 mayo 2022

Estudio de Judaísmo: Leyes de la Cuenta del Omer 2 y Costumbres de Duelo

https://youtu.be/_lmmHlMCJhI

Rabí Akiva dijo: “Ama a tu prójimo como a ti mismo” es un gran principio de la Torá. Un principio similar se obtiene de la famosa historia de un prosélito que deseaban convertirse al judaísmo, a condición de que alguien le enseñe toda la Torá mientras está parado en un pie. Hilel el Viejo aceptó su conversión y le dijo: “Lo que odias, no lo hagas a tu amigo [la visión negativa de “ama a tu prójimo como a ti mismo”], eso es toda la Torá y lo demás es comentario. Ve y estúdialo”.

Obviamente, toda la Torá es verdad, Dios nos ha dado la Torá, pero Hilel el Viejo y Rabi Akiva nos enseñan que hay espacio para meditar en el principio que es el “gran principio” de la Torá, la señal que nos pone en el camino correcto.

La necesidad de esas luces de guía es mayor cuando un extranjero quiere acercarse al mar infinito de la Torá y necesita un mojón para mostrarle dónde empezar. Esta es la razón por la que el principio más grande de la Torá se aprende de un prosélito que se viene a convertir. Un verdadero converso no está obligado a saber toda la Torá antes de convertirse, pero sí necesita saber los fundamentos esenciales de la fe judía, entonces puede aceptar el yugo de la Torá y las mitzvot con toda sinceridad. Rabí Akiva, el gran sabio de la Torá, también llegó a la Torá como un “extranjero”, era un baal teshuvá (un judío secular que se convierte en observante de los preceptos), que sólo comenzó su estudio de la Torá a la edad de cuarenta años.

Estos dos “extranjeros”, el baal teshuvá y el converso, que inician su estudio de la Torá de la nada a una edad avanzada, están en la necesidad de una estrategia de acceso directo y es nuestro privilegio aprender el gran principio de la Torá a través de sus méritos. Nuestra generación es también una generación de teshuvá (arrepentimiento), por lo que muchos judíos están lejos de la Torá y muchos desean regresar a su origen. Por eso, más que nunca, necesitamos un camino que nos permita acercarnos a la Torá

Kavanot nuevas de la Cuenta del Omer,

Mes de Iar 5782

Rabino Jaim Frim

Kavanot nuevas de la Cuenta del Omer, Mes de Yiar - Cabalá por Zoom

https://youtu.be/45Y4Vbxm9Uo

AUDIO: https://t.me/galeinai_audios_es/829

Innovaciones en Cabalá ¿Es posible?

Algunos piensan que la Torá de la Cabalá es una enseñanza que un discípulo recibe en un susurro de su maestro, de boca a boca, sin desviación y sin novedades. Pero en verdad, como cualquier área de la Torá, también en el interior de la Torá hay una renovación constante. Por el contrario, son precisamente las definiciones más profundas son entregadas a quien es “sabio y comprensivo”, quien puede, sobre la base de sugerencias sutiles, ir más profundo, y pensar y entender más y más.

De hecho, el significado de קבל, kabel, la raíz de la la palabra Cábala en la Torá es de הקְבלה, hakvalá (“Los bucles paralelos –makbilot– de una mujer con su hermana”, Shemot 26:5, refiriéndose a los lazos 50 que unen las pieles del techo del Tabernáculo del Desierto). La sabiduría de la Cabalá es la sabiduría de los paralelos y comparaciones verdaderas, en la Torá y en la realidad, para las estructuras interiores de la realidad: las letras del nombre Havaia, las Diez Sefirot y más y más.

Los paralelismos, por su naturaleza, están compuestas por la unión entre los sistemas antiguos y conocidos y los nuevos descubrimientos que se “invisten” en ellos. Así, cuando se hacen paralelos verdaderos y correctos, se logran innumerables innovaciones maravillosas que surgen de estas comparaciones, tanto al volver a exponer el tema aprendido a la luz del sistema original al que es paralelo, como una “luz que retorna”, porque con cada pensamiento adicional a través de la cual se expresa el sistema original, le agrega en relación con ella más y más entendimiento y conocimientos nuevos.

Un ejemplo de esta forma de observación, que caracteriza todas las antiguas-nuevas enseñanzas del rabino Ginzburg, se encuentra en la lección principal de esta semana en el folleto: Nuevas intenciones para Sefirat haOmer, que abren los ojos a la meditación y al servicio del corazón nueva y fresca durante la cuenta del Omer de este año. El regreso a los días de la juventud que caracterizan los días de la primavera y el verano.

Meditación sobre la Cuenta del Omer

Rectificación de las Emociones y el mes de Iyar

5781

Rabino Jaim Frim desde Israel

Auspiciado por la comunidad Gal Einai de Chile

Meditación sobre la Cuenta del Omer - Rectificación de las Emociones y el mes de Iyar 5781 - Zoom

https://youtu.be/HTAY7EJ67y4

AUDIO: https://t.me/galeinai_audios_es/492

EL OMER 5778

Gal Einai Internacional clase 13

13 GAL EINAI INTERNACIONAL El Omer

https://youtu.be/purTP-2JSuA

Videos para Sefirat haOmer

por el Rabino Jaim Frim 5780

16 de Nisan

Día Uno del Omer

EL SEXTO HIJO QUE CORONA EL SEDER DE PESAJ

16 de Nisan - Día Uno del Omer - El sexto hijo que corona el seder de Pesaj

https://youtu.be/ABq2yG2fB7A

02 Cuenta del Omer

Semana 1 dia 2

Rigor en la bondad

LA DIFICULTAD DE LA CONVIVENCIA EN EL AMOR

Shabat 17 de Nisan -  Día Dos del Omer: La dificultad de la convivencia con amor

https://youtu.be/eBWfrRX8Zj0?list=PLS1OhwY8Oh7fJoDfYzofMeIeMo5cMoxAH

día 3 del Omer

Tiferet ShebeJesed

La armonía del amor en la pareja

18 de Nisan - Día 3 del Omer Tiferet ShebeJesed - La Armonía de la Pareja

https://youtu.be/vbssOikcEFg

19 de Nisan – Día Cuatro del Omer

EN TI CONFIARON NUESTROS PADRES

Netzaj ShebeJesed – Victoria en la Bondad

Confianza en el Amor – Moshé en Abraham

19 de Nisan - Día Cuatro del Omer - En Ti Confiaron nuestros Padres

https://youtu.be/fiivV9Su_sM

21 de Nisan – día 6 del Omer

EL BANQUETE DEL MASHÍAJ

Ajaron Shel Pesaj 5780

21 de Nisan - día 6 del Omer y El banquete del Mashíaj - Ajaron Shel Pesaj 5780

https://youtu.be/D5yQTQSNW2o

22 de Nisan – Dia 7 del Omer

EL REY HUMILDE

El Altruísmo del Rey David con el Amor de Abraham

El Marrón del Árbol del Cielo Azul

22 de Nisan - Dia 7 del Omer - El Rey Humilde

https://youtu.be/xbNaMJ2dG_Y

23 De Nisan – Dia 8 Del Omer

ME LIMITO POR AMOR

23 De Nisan - Dia 8 Del Omer - Me Limito Por Amor

https://youtu.be/J68Oeg8VebY

Día 24 de Nisan – Día 9 del Omer

RIGUROSAMENTE AMOROSO

Día 24 de Nisan - Día 9 del Omer - Rigurosamente Amorosos

https://youtu.be/gphYb8GGSRM

25 de Nisan – Día 10 del Omer

MI HÉROE FAVORITO

25 de Nisan - Día 10 del Omer - Mi Héroe Favorito

https://youtu.be/eGTZhftHUUY

26 de Nisan – Día 11 del Omer

VICTORIA EN EL PODER: LA FUERZA EQUILIBRADA

Y bendición de los árboles frutales

26 de Nisan - Día 11 del Omer - Victoria en el Poder: La Fuerza Equilibrada

https://youtu.be/Q53cK_Y7Sto?list=PLS1OhwY8Oh7fJoDfYzofMeIeMo5cMoxAH

Moshé en Itzjak,

violeta en el rojo

SEFIRAT HAOMER Y LOS NOMBRES DE DIOS

dias 12 y 13

Hagan todo lo posible para traer al Mashíaj

CLASE COMPLETA

Sefirat Haomer Y los Nombres de Dios - dias 12 y 13 - Hagan todo lo posible para traer al Mashíaj

https://youtu.be/K8LJw7oqtlA?list=PLS1OhwY8Oh7fJoDfYzofMeIeMo5cMoxAH

27 de Nisan – Día 12 del Omer

RECONOCE TU FUERZA INTERIOR

27 de Nisan - Día 12 del Omer - Reconoce Tu Fuerza Interior

https://youtu.be/tnjQcZKD5xY?list=PLS1OhwY8Oh7fJoDfYzofMeIeMo5cMoxAH

Dividimos la clase de ayer en tres partes según el tema de cada uno:

Hod ShebeGuevurá Reconocimiento en el Heroísmo

Aharón en Itzjak

Naranja en Rojo

28 del Omer – Día 13 del Omer – Iesod ShebeGuevurá

ROMPER Y PONER BARRERAS

28 del Omer - Día 13 del Omer - Hod ShebeGuevurá - Romper y Poner Barreras

https://youtu.be/gY5CczEB5uA?list=PLS1OhwY8Oh7fJoDfYzofMeIeMo5cMoxAH

Fundamento en el Rigor

Iosef en Itzjak

Verde en el Rojo

Fundamento en el Rigor

El poder de la conexión correcta

28 de Nisan

LA CUENTA DEL OMER Y LOS NOMBRES DE DIOS EN CADA SEFIRÁ

28 de Nisan - La Cuenta del Omer y los Nombres de Dios en Cada Sefirá

https://youtu.be/HhtNXrrxLfo?list=PLS1OhwY8Oh7fJoDfYzofMeIeMo5cMoxAH

Jesed: Kel

Guevurá: Elokim

Tiferet: Havaia

Netzaj: HavaiaTzevakot

Hod: Elokim Tzevakot

Iesod: Shakai

Maljut: Adnut

29 de Nisan – Día 14 del Omer

– Un Rey que sirve a su pueblo

Maljut ShebeTiferet Reinado en el Poder

29 de Nisan - Día 14 del Omer - Un Rey que sirve a su pueblo

https://youtu.be/LBHWR0KBTrc

3 De Iyar – Día 18 Del Omer

Ajarei Mot Kedoshim- Netzaj ShebeTiferet

HASHEM AMA NUESTRA FIDELIDAD

3 De Iyar - Día 18 Del Omer - Ajarei Mot Kedoshim- Netzaj ShebeTiferet Hashem ama nuestra fidelidad

https://youtu.be/kbQfQ973V0g

Para refuá Shlemá de Jaim Sholem DovBer ben Devora Ruth

Salmo 20:

Para el Director del Coro; un Salmo por David: Que Adonái te responda en el día de aflicción; que el Nombre del Dios de Iaacov te fortalezca.Que El envíe tu ayuda desde el Santuario, y desde Tzión te sostenga. Que El recuerde todas tus ofrendas, y que siempre acepte favorablemente tus sacrificios. Que El te otorgue lo que tu corazón desea, y cumpla todas tus sugerencias. Nos deleitaremos en tu salvación, y en el nombre de nuestro Dios alzaremos nuestros estandartes; que Adonái cumpla todos tus deseos. Ahora sé que Adonái ha salvado a Su ungido, respondiéndole desde Sus santos cielos con la poderosa fuerza salvadora de Su diestra. Algunos [confían] en carrozas y algunos en caballos, pero nosotros [confiamos en el] invocamos el Nombre de Adonái nuestro Dios. Ellos se doblan y caen, pero nosotros nos levantamos y nos mantenemos firmemente erguidos. Adonái sálvanos; que el Rey nos responda en el día en que clamamos. Levitico Capítulo 16 1 Dios le habló a Moshé justo después de la muerte de los dos hijos de Aarón, que trajeron una ofrenda [no autorizada] ante Dios y murieron. 2 Dios le dijo a Moshé: Habla a tu hermano Aarón, y que no entre al santuario [interior] que está más allá del separador que oculta al Arca, para que no muera, puesto que Yo aparezco sobre la cubierta del Arca en una nube.

Ajarei Mot – Kedoshim

Mes de Iaar – Omer – Tiberia

Ajarei Mot - Kedoshim - Mes de Iaar - Omer - Tiberia

https://youtu.be/9R9LsZVOTwk?list=PLS1OhwY8Oh7fJoDfYzofMeIeMo5cMoxAH

Ultimo Dia Del Omer y Shavuot:

TODO EL PUEBLO VIO LOS SONIDOS… ¡¡¡VIERON Y TEMBLARON!!!

Ultimo Dia Del Omer y Shavuot: Todo el pueblo vio los sonidos... vieron y temblaron!!!

https://youtu.be/sGUNv35k0d8

El Midrash (Bereishit Rabá 1:1) explica que así como un arquitecto usa un plano para construir un palacio, Di-s también usó la Torá para crear los mundos. “Di-s miró la Torá y creó los mundos a partir de ella”. (Zohar II 161a) En consecuencia, toda la Creación está contenida en ella. Estos [Diez Mandamientos] fueron grabados en tablas de piedra y todos los secretos contenidos en ellos fueron revelados a todos* [los israelitas que estaban al pie del monte Sinaí].

Ellos vieron todo esto con sus propios ojos, y sus corazones pudieron observar la sabiduría que los iluminó. Esta sabiduría también afectó sus emociones. Seguimos esta noche con el Zohar de la Entrega de la Tora, y con el último día del Omer.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *